De ideas a implementación: fundamentos de la Creatividad 

Creatividad e innovación, dos conceptos que son tendencia y que se pueden confundir como sinónimos, aunque no lo son. En realidad, la creatividad y la innovación se complementan, y funcionan como habilitadores de la transformación digital de los negocios y las organizaciones. En esta entrada de iwie.blog, conoce qué es la creatividad, desde los autores más reconocidos, y acércate a su relación con la innovación ¡Vamos! 

Seguro, alguna vez, has escuchado “eres muy creativo, tus ideas son muy buenas”. O, “ella es muy creativa; mira, es toda una artista”, y posiblemente también, “la creatividad es solo de los diseñadores, ellos sí son originales”. Resulta que no, la creatividad, en realidad, “es una parte natural del ser humano”, de acuerdo con el libro de Scoot Isaksen, Dorval y Treffinger, Creative Approaches to Problem Solving: A Framework for Innovation and Change; la creatividad es una habilidad de todos los humanos. ¡Sí!✌️   

Alrededor del concepto de creatividad, todavía surgen una serie de mitos, creencias y situaciones que lo describen como algo fuera de lo común, mágico y propio de comportamientos inusuales, o únicamente artísticos. 

Similar pasa con la innovación, se confunde con transformación digital, con la integración de tecnología, o simplemente con la aplicación de metodologías como Design Thinking. Aquí, te contamos más sobre innovación.

Ahora bien, al revisar diversos conceptos de creatividad, se logra comprender que “la creatividad es una habilidad que se desarrolla y que está asociada al cambio, la novedad y la utilidad”, de acuerdo con Karina Loera, máster en Ciencias de la Creatividad, consultora de innovación, facilitadora, y Directora de Strategik Minds. A continuación, puedes saber cómo y por qué la creatividad es una habilidad que se desarrolla. 😉 

¿Qué es la creatividad? 

La creatividad es el resultado de la interacción entre el conocimiento, la imaginación y la evaluación, teniendo como catalizador la actitud de la persona. Esta definición parte de la famosa fórmula de la creatividad C= f a (K,I,E), propuesta por la Dra. Ruth B. Noller, en la que se plantea que la creatividad (C) es una función de la actitud (a) hacia el conocimiento o Knowledge  (K), la imaginación (I) y la evaluación (E). 

En otras palabras, la creatividad se desarrolla a partir de todos los conocimientos previos sobre una temática específica, la capacidad de imaginar y visualizar posibles escenarios o soluciones, y la habilidad de evaluar, es decir, seleccionar las más adecuadas para hacerlas realidad. 

Otro concepto de creatividad que proponen Gerard Puccio, Marie Mance, y Mary Murdock es “la producción de ideas originales que sirven a algún propósito”. Es decir, la creatividad está al servicio de un por qué, de acuerdo con los autores del libro Creative Leadership: Skills That Drive Change. No es solo ser creativo, es ir más allá y que las ideas alcancen un objetivo.

Por su parte, el especialista del Center for Creative Leadership, Stan Gryskiewicz, define la creatividad como asociaciones novedosas que son útiles. Y en una frase sencilla, práctica y fácil de recordar, el concepto de creatividad se resume en “novedad que es útil”, de acuerdo con Puccio, y sus compañeras autoras del libro anteriormente mencionado, que es toda una biblia sobre la creatividad y su proceso.  

La creatividad en las organizaciones 

Al revisar un enfoque más cercano a las personas, los procesos y las organizaciones, la creatividad “se refiere a cómo las personas enfocan los problemas y soluciones, su capacidad de poner las ideas existentes juntas en nuevas combinaciones”, de acuerdo con la reconocida autora Teresa Amabile, en su artículo How to Kill Creativity, de Harvard Business Review.  

Adicional, la autora asegura que la creatividad necesita de la interacción de tres componentes: habilidades de pensamiento creativo, experticia (conocimiento y experiencia) y motivación.  

También existen otros factores que posibilitan la creatividad, y es aquí cuando hacen su aparición las 4P`s de Rhodes: Persona, Producto, Proceso y Ambiente (Press, en inglés). 

Rhodes indica que estas 4P`s permiten entender la creatividad a partir de “cómo interactúan las personas creativas, las operaciones dentro del proceso creativo, los resultados creativos y el contexto o lugar para la creatividad”.  Si quieres saber más sobre el proceso y el producto creativo, en este artículo de iwie.blog te lo contamos. 😊

Ahora ya lo sabes, la creatividad no es solo arte, imaginación o colores; también es conocimiento, actitud y ejecución. La creatividad es una habilidad propia de todo ser humano, y puede ser desarrollada siguiendo el proceso adecuado, y teniendo presente diversos factores que interactúan entre sí.

¿Te gustaría fortalecer tus habilidades de creatividad? Te invitamos a conocer más de nuestro contenido en iwie.blog.